Cogio un rotulador negro y comenzo a pintarme ojos. Por el brazo, la espalda, el pecho. Un olor fuerte a pintura inundó la habitación. Su mirada y la punta del rotulador me hacian cosquillas en el cuello.
-Quiero que a partir de ahora tenga mil ojos, y todos para mi.
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Yo me conformo con dos. No soy racista, pero la gente con muchos ojos, me asusta.
ResponderEliminarMuas!
los ojos
ResponderEliminarrojos por llorar
negros por trasnochar
grises por pintarme con Khol
párpados de hormigón
que se queman al sol de mi mirada
azul para mirar
tus ojos
descubrir tus antojos
y trampantojos en tu piel
suave superficie
para enrollar
mis palabras con sabor a miel
que me envicie la tinta
que chupo de tus poros
sabe distinta
tiene la llave
a tus secretos...
los ojos que hacen cosquillas son la ostia. qué bonito micro. mua!
ResponderEliminarque fuerte, leyendo esto acabo de recordar que esta noche soñe que me pintaba los ojos con khol, super negros, por arriba y por abajo, rematando bien los lacrimales y poniendo la linea muy negra...
ResponderEliminaresque yo eso nunca jamas lo hago despierta sabes? y me ha resultado curioso acordarme del sueño aqui, en tu casa jejje
saludos cuentista ;)
jajaja..me ha gustado mucho este.
ResponderEliminarLa escena esta cargada de mucha ternura caprichosa de esa que reparte el amor.
Mil ojos y todos para mi...Ser el centro del puto universo.(AMOR EGOISTA ENTREGA)
Un beso and saludete